martes, 27 de julio de 2010
Lo que nos falta
jueves, 3 de junio de 2010
Apuesto por la prensa escrita
Qué fácil le quedó a J.J., pensé, mientras recordaba este último mes una serie de rumores sobre otros candidatos, que se camuflaron entre los debates en horario triple A tan fulminantes en la decisión de voto de la mínima porción de colombianos que lo ejercimos. Pero ganó en primera vuelta Santos con el respaldo de ciertos amigos cercanos y me dije, coño, de qué vale haber estudiado; de qué vale estar informados si acaso lo estamos entre planetas, prisas, terceros canales, censuras y artimañas de la maquinaria parapolítica. Y por un rato traté de ponerme en los calzones de quienes le respaldaron para saber por qué diablos votaron por él; por Uribe? por haber liberado a Ingrid? o por los más de tres mil pobres que erradicó su gestión en Soacha y en otras tierras hostiles, sin mencionar otras perlas. Y así, cambiando de canal, llegó mi respuesta.
Y paso nuevamente de canal mientras Juan Manuel sonríe glorioso con su cuero tieso del botox a una multitud enardecida. Ignorancia o corrupción, se me ocurre. Ante este analfabetismo mediático, este apego a lo audiovisual, y esa sumisión especial a la televisión que te despierta con la voz de Jota Mario y te acompaña hasta el vilo con concursos de media noche, he pensado seriamente que lo único que nos hace falta, entre toda nuestra indiferencia, es leer un poco más allá de las tablas de calorías y horóscopos. Lectura de la cual desisto en días como ese, donde una mala propaganda basta para convencer.
Para qué escribir si a nuestro intelecto lo supera un televisor. Quizá siga creyendo en el poder de los buenos textos. En la pluralidad, credibilidad, en la independencia y en la movilización social que puede contener una sola columna o un buen reportaje. En el placer que me causa creer que, por lo menos, no estoy tragando entero en el almuerzo con el guiño de Vicky, porque hay otras personas esperando entre páginas que me han guiñado, sino con la verdad, con evidencias. Porque yo decido qué leer, por independencia y seriedad, y porque aún tengo esperanzas en quienes sólo discuten con argumentos de RCN, por eso le apuesto a la prensa escrita.
jueves, 29 de octubre de 2009
Un error publicitario, el escándalo de AIS
La malformación del programa subsidiario impulsado por el ex Ministro de Agricultura colombiano Andrés Felipe Arias, precandidato presidencial del conservatismo, fue gestada para reducir la desigualdad en el campo y fortalecer la competitividad de grandes empresarios nacionales, entre ellos, narcotraficantes y funcionarios públicos, en preludio a un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y como gratificación por apoyo a la campaña reeleccionista del presidente Álvaro Uribe.
El ex ministro nunca dijo que Agro Ingreso Seguro fuese para los agricultores pobres, contrario a lo que piense el país. Ellos bien encajaban en “Familias en Acción”, diría el precandidato. Su programa bandera sólo tuvo un mal publicista.
Y un target group tergiversado que satanizó a las convocatorias democráticas -que ya llevan tres años- en las que el 7% de sus favorecidos -según el senador del Polo Jorge Enrique Robledo- recibió el 70% de unos recursos públicos destinados a ciertos beneficiarios, de los que nunca se afirmó primaría el 68% de los 2 millones 687 mil campesinos que viven con menos del salario mínimo, ni ese 30% en estado de indigencia-según Planeación Nacional-, como lo quiere hacer ver la opinión pública y los partidos de oposición al exigir la devolución de los dineros, la renuncia del actual Ministro de Agricultura Andrés Fernández y la investigación pertinente del caso.
Investigación que también incluiría a poco más de 45 personas que apoyaron la reelección presidencial y que fueron subsidiadas por éste programa dadivoso, entre las que figura Danny, el hijo de Alirio Villamizar, senador procesado por vender su voto en la primera reelección de Álvaro Uribe a cambio de una Notaría, y el mismo que modificó el artículo 58 del Estatuto Tributario –Ley 1111 de 2006- que permitió que Danny recibiera en 2008 un subsidio de 496 millones no reembolsables y libre de impuestos.
Es que los padres qué no hacen por sus hijos, o si no pregúntenle a Uribe.
Pero no sólo los reeleccionistas deben sentirse agobiados. Otros figurines del partido que promovió la moción de censura del actual ministro Fernández, el Liberal, fueron beneficiados con esos recursos públicos. Ellos son el congresista Camilo Sánchez y el hijo de la Senadora Cecilia López, quien nunca pensó en coincidir con el “Pincher” Arias al reconocer que su hijo también “ganó en franca lid”.
Y es que el Gobierno enfatiza que de las 316.000 familias que recibieron subsidios el 85% eran pequeños productores, el 13% medianos y el 2% grandes- según El Tiempo- a lo que Julián Gómez, director de AIS, aduce que no hay trampa en los procedimientos pues “los beneficiarios cumplían todos los requisitos y criterios de evaluación técnica, ambiental, financiera y productiva para recibir las ayudas”, así que, Cecilia y Camilo duerman tranquilos, como lo hace María Mercedes, la prima del ex Ministro del Interior Carlos Holguín Sardi.
Además, Agro Ingreso Seguro aseguró fortalecer “al sector agropecuario para enfrentar el reto de la internacionalización de la economía“, lo que no excluye del concurso a los grandes empresarios, y genera oportunidades de desarrollo a pequeñas y medianas empresas, éstas últimas con activos estipulados entre los 50 y 4.900 millones de pesos, rango en el que bien caben emporios económicos y familias de gran influencia política como los Dávila Fernández en el Magdalena, donde padre, madre, hijos y nuera –la ex Señorita Colombia Valery Dominguez- recibieron por separado subsidios no reembolsables que oscilan entre los 2 mil millones de pesos.
Familias felices
Agro Ingreso Seguro hizo muchas familias felices con un mantra tan mágico como Abra Cadabra: Riego y drenaje.
Entre ellas los Dangond y los Lacouture, que siguieron los pasos de un Silvestre que recibió 478 millones de pesos en subsidios un año después de que su empresa Palmas Oleaginosas de Casacará financiara las campañas de Uribe en 2002 y 2006.
Igual ocurrió con otro donante uribista, Alfredo Lacouture Dangond, que ganó en dos ocasiones la convocatoria de AIS en 2008. La primera por 458 y la segunda por 417 millones de pesos. De allí le copiaría su dinastía. Su hijo Alfredo Luis ganó otras dos convocatorias que suman 900 millones, mientras madre e hija sólo reunieron un monto miserable: 752 millones.
Agro Ingreso Seguro permitió que por primera vez el Niño Dios contentara por igual a los hermanos Vives Lacouture que aparentemente viven de la extracción de Palma Africana. Entre los siete recibieron 3789 millones de pesos, sin contar a los otros parientes que quedaron por fuera, entre ellos, un aportante de la Asociación Colombia Primero, que adivinen qué financió.
El campo debe ser igual para todos los ciudadanos y para todos los cultivos, ilícitos o no. Por ello, los narcos también brillaron en esta convocatoria. Jensy Miranda Dávila, alias ‘Ernesto’, y el extraditado del Tío Sam Ismael Augusto Pantoja, alias ‘El Negro’, también recibieron incentivos para fortalecer sus cultivos.
Otras familias poderosas que se hicieron acreedoras a 8829 millones de pesos fueron los Tribín, los Fernández de Castro y los Vives en la zona bananera; los Riveros Páez en el Meta, los Posada Grillo en el Valle y los Cuello en la Guajira.
¿Y la palma qué?
Como no todo puede ser malo, se debe considerar que estas familias de medianos empresarios favorecidos van a generar con seguridad cientos de empleos directos como lo estipuló en sus objetivos la convocatoria de AIS.
Cómo no, si el presupuesto del Ministerio de Agricultura pasó de 245 mil millones en 2002, a 1.4 billones en 2007 con el que bien se cobijaría ocho veces más a los trabajadores del agro y se multiplicarían en ese número las ganancias.
Y eso último sí que se está haciendo pues la mayoría de las empresas favorecidas por AIS se dedican a la explotación de palma africana de donde se extrae el biodiesel.
Para Tadeo Martínez, la palma está desplazando a la tradición de la zona bananera pues ésta no requiere de mucha mano de obra -mientras el banano emplea a un hombre por hectárea, la palma emplea a uno por cada diez-, es de fácil crecimiento –no necesita tanta agua como el banano- y una vez sembrada empieza a producir desde los tres años y puede hacerlo hasta los 50 - Mientras la soya produce en una hectárea sembrada 500 Kg de aceite, la palma produce 5.000 Kg-.
“Si en el Magdalena hay 35.000 hectáreas destinadas a este cultivo y por cada diez hectáreas se emplea a una persona, se puede concluir que hoy hay tres mil quinientos empleos directos. Si sólo en Zona Bananera disminuyó el total de hectáreas cultivadas de banano de 12.500 a 7.600, es decir 4.900 hectáreas menos, y en este cultivo se emplea un hombre por cada hectárea, se puede decir que se han perdido 4.900 empleos en nueve años”.
Lo cierto es que la palma es un cultivo dañino para todas las especies de flora y fauna que lo circunden y que poco a poco deteriora el suelo con el empobrecimiento de su capacidad agronómica, según asegura el Instituto Alexander Von Humboldt.
Preocupante ¿no?
Mientras tanto, el Presidente Uribe asegura que “en un país con declinación en petróleo, el biodiesel se convierte en una alternativa necesaria. Por eso nosotros miramos con mucho entusiasmo el cultivo de palma”, cultivo que en la historia reciente ha sido custodiado por grupos paramilitares como el Bloque Élmer Cárdenas de las AUC con presencia en el Chocó y el bajo Atrato, que “condiciona su desmovilización sobre la base de que se apoye la palma africana como proyecto agroindustrial”, según una investigación de Orlando Contreras.
Tal vez sean meras coincidencias.
***
El caso Carimagua y el error publicitario de Agro Ingreso Seguro –un programa que operó bajo la ley- sólo reflejan la transparencia de unos precandidatos que se untan de pueblo con tranquilidad, a pesar de las acusaciones mediáticas que parecen no atormentarlos, porque sabrán que cuentan con el apoyo incondicional de los minusválidos productivos del campesinado y los desplazados que todavía creen en ellos, y del motor de la economía nacional, sus grandes empresarios terratenientes. El amo y su “pincher”.
sábado, 26 de septiembre de 2009
La incultura de la Ministra
Hace días asistí a uno de esos seminarios en los que intelectuales tratan de arreglar, en pocas horas, un mundo al que no pertenecen, entre sus cocteles y cenas rutinarias.
Era el seminario Malraux, en el Centro de Formación de la Cooperación Española en Cartagena, que intentaba hacer un diagnóstico y proponer soluciones para el sector cultural hoy, que entre otras cosas, puede ser la clave para desarrollar aquellos países que no lo están, según sus premisas románticas.
Y les creo. Aunque si el primer día sólo iba por cuestiones de mercadeo, para el segundo me quedó claro que lo único importante y sustancioso, en ese encuentro de pensadores, era el refrigerio de las once y cuarto.
Y no es que el desarrollo en esta vía sea imposible, pero no concibo cómo se exponen a la palestra decenas de ilustrados para hablar sobre un concepto del que, ni ellos mismos, tienen consenso: la cultura.
Resultaba más amena una conversación en el Congreso de la República o la repetición del festival anodino de Unasur. Por lo menos me reí con el libro blanco de la CIA. Pero no. Ahí estaba con mis audífonos traductores, escuchando que la cultura debía venderse, que el futuro era la industria, la internet, y un sinfín de tópicos que ignoraban, como cualquier modelo copiado de la experiencia gringa o europea, a los verdaderos gestores de la misma: los pueblos.
Con decir que después de haber estudiado sujetos claves para el sector en el que trabajo, me encuentro que "A mí me invitaron a esto sabiendo que mi fundación no tiene nada que ver con cultura. Yo se los dije", y sin embargo la carta de presentación de la representante de la organización brazilera Ethos decía otra cosa.
Más Ana Leticia por lo menos fue amable y atendió nuestras inquietudes; pero el máximo ente de cultura, que se puede entender como educación o conocimiento -entre algunas de sus acepciones-,Paula Marcela Moreno Zapata, la Ministra de Cultura colombiana de elegante traje impecable, fue la fiel muestra de que no podemos entrar a proponer soluciones para la cultura si aún no hemos superado los conflictos internos que reflejan nuestra mala educación.
Algo así como hablar en un recinto sobre paz en el conflicto, después de una intensa jornada en el hogar de maltrato a la mujer, al mejor estilo del tío Joaco.
Ese día evidencié la incultura de la Ministra, que estando sola, no quiso estrechar mi mano ni escuchar mi nombre, quizá porque no tenía canas, un traje de dos mil dólares, un Blackberry, o un curso evidente de francés. Paula sólo se dio la vuelta con elegancia y caminó tras unas señoras, que a juzgar por sus trajes, estarían a su nivel.
***
Recuerden que con la misma actidud pueril de la Ministra, les tratarán algunos políticos por los que vayan a votar en las consultas del 27 de septiembre, si es que llegan a quedar sus listas. El respeto hacia ustedes sólo quedará hasta las urnas, así que en el mejor de los casos, tenga dignidad y vote a conciencia o hágase compadre de alguno de ellos.
domingo, 16 de agosto de 2009
Yo tampoco quiero vecinos gringos
Sé que Hugo Chávez por estos días anda bien irritable. Y que lo pone ansioso el hecho de que su aliado ecuatoriano le copie tan mal, incluso en el campo de las evidencias. Pero jamás había estado tan de acuerdo con él, aunque fuera en una más de sus intromisiones en el gobierno ajeno.
¿Por qué le inquieta tanto a Chávez la instauración de nuevas bases militares estadounidenses si ya existen tres, en Caquetá y en el Meta? Por qué, si la ayuda gringa no es nueva en el país vecino.
“Ya nadie sabe cuantas bases son, dos, tres o cuatro… estamos amenazados por el imperio Yankee. Es una amenaza para Venezuela y para toda América Latina, quieren convertir a Colombia en el Israel latino”, manifestó el mandatario venezolano, quien cesó sus relaciones diplomáticas con el gobierno Uribe por la polémica determinación militar, que se instauró hace días, con una gira relámpago que contó con el rechazo de Argentina y Bolivia, y la total aprobación del gobierno peruano.
Si dichas bases militares se contemplaban como un refuerzo de la intervención americana que inició en administraciones pasadas, por qué en el itinerario del presidente Álvaro Uribe no estaba anunciada esa gira internacional de excusas previas a la cumbre de Unasur en Ecuador, a donde no asistiría. ¿Qué tienen de especial esas bases gringas, para ser excusadas internacionalmente, de las que ya están instauradas en nuestro territorio?
Hasta ahora las fuerzas militares colombianas y el Ministerio de Defensa, sin ninguna ayuda externa, habían logrado golpes exitosos, como lo prueba la ingeniosa operación Fénix, donde no hubo participación gringa. ¿Qué acaso no nos basta nuestro ingenio, bastante vanagloriado por esos días y en operaciones como Jaque?
¿Qué diferencia puede marcar la llegada de nuevos soldados gringos y un mayor entrenamiento bélico? Solamente el aval norteamericano a la política de Seguridad Democrática, la que mal asocia su fin con la llegada de un presidente distinto a su creador. Por eso se protege tanto su permanencia en el poder.
Las querellas de Chávez son lícitas en cierto sentido. No encuentro diferencia entre la ayuda militar rusa que recibe la fuerza armada de su país, que por cierto se infiltró en las filas de las Farc, de la intromisión gringa que inició con el Plan Colombia y el Plan Patriota ¿Qué tienen de especial esas bases que Hugo Chávez se siente intimidado?
“Uribe miente, es un mentiroso compulsivo. El gobierno colombiano no podrá aplicar sus leyes ante los Yankees. Un militar colombiano no podrá dominar a un soldado americano. Esto es una amenaza para la paz de Sur América. Están creando las bases para hacer un ataque en Venezuela”, reitera Chávez y con mucha razón.
El discurso terrorista que Estados Unidos está imponiendo a escala global, le ha permitido desde los ataques del 9/11 la incursión legal en cualquier territorio del que se sientan amenazados, con algo similar a la legítima defensa que Colombia utilizó en el ataque a la base de Angostura.
Si miramos atrás, el gobierno Bush se sintió intimidado por la amenaza terrorista y las armas de destrucción masiva que supuestamente guardaba el gobierno Irakí. Su intromisión no sólo terminó con la muerte de Sadam Hussein, sino en el cambio de régimen de un país que nunca tuvo tales armas, y cuyas reservas petroleras evidentemente conformaban el verdadero meollo del asunto. Algo similar ocurrió en Afganistan.
“Aquí en Venezuela tenemos la reserva de petróleo más grande del planeta. Ésta es la razón de más peso de que Estados Unidos quiera poner aquí sus bases. El petróleo venezolano”. Estoy de acuerdo con Chávez. Colombia le está cediendo espacio poco a poco a una jurisdicción que no vacilará en actuar en tanto se vea amenazada por el terrorismo. Y no por fortalecimiento militar, pues dicha fuerza demostró en el pasado año una efectividad ególatra que fue reconocida por el pueblo colombiano y agradecida por las víctimas del conflicto.
Ningún almuerzo es gratis. Ojalá y no llueva tan duro.
martes, 11 de agosto de 2009
El amor se riega en el Parque de las Flores
Hace días fui por un jugo de mora al Parque de las Flores, el que queda en la avenida Venezuela a la altura del CitiBank.
Imaginé que así debe oler el cielo. Hay aproximadamente 47 módulos en los que se venden distintas especies de flores, aquellas delicadas partes reproductivas de las plantas espermatofitas o fanerógamas.
Admito que poco me gustan. Sí, son bellas y fragantes, pero el centro del girasol parece un estropajo y me recuerda no sé por qué, ese rapé mariposa con el cual tengo serios traumas, y los cartuchos, tan raros y duros, que me cuesta entender por qué son tan apetecidos por las suegras y solteronas en los protocolos nupciales. Y no me refiero al blanco de su hoja.
Sin embargo siempre me agradaron los tulipanes. Quizá porque nunca he sentido el olor que se desvanece lentamente tras su muerte, como si Dios los hubiese puesto para recordarnos lo efímero de la belleza y de nuestra vida misma. Por eso no disfruto de sus pétalos frágiles, desprendidos uno a uno por enamorados y despechados, o bien, marchitos en los adioses de las coronas fúnebres.
Al pagar el jugo caminé por ese espacio, no tan grande, que comparten sujetos que expiden actas y extrajuicios con sus máquinas de escribir. Vendedores de minutos, de jugos, de tintos, de celulares, todos bajo la sombra del gran árbol de bonga que protege a sus frágiles compañeras.
“Ellos no tienen porqué estar aquí, están informalmente. Los de las máquinas y otros están dentro del parque pero no pertenecen a la corporación”, me comentó Alfonso Reyes, presidente de la Corporación de Vendedores de Flores –Corvepaflor- mientras terminaba su almuerzo.
Según Reyes, el parque fue organizado en 1983 por varios comerciantes que se dedicaban a la venta exclusiva de flores. Francisco Julián Lopera es uno de ellos. Su floristería Isis es de gran tradición en el sector.
“El 30 de agosto, hace cinco años, pasamos a ser vendedores formales con la remodelación del parque que tiene 47 módulos, entre los que entraron hace pocos años, 10 ventas de jugos y de discos”, asegura Lopera. Y seguí mi recorrido por el tramo central del parque.
Ahí estaban las margaritas, los lirios, violetas, jazmines, pompones y claveles, cada una con un colorido especial, esperando ser compradas. Se pueden conseguir flores de quinientos pesos -un girasol-, hasta los arreglos más elaborados que pueden costar 20 mil pesos, dependiendo de su complejidad.
“A nosotros nos gusta ayudar a la gente, cobramos barato”, decía Marlene Martínez, de la floristería Marle. “Compran mucho para matrimonios, primeras comuniones, arreglos, centros de mesa y decoraciones”, y por un infortunio rutinario, flores para despedir a un ser querido. Algunas de ellas mueren sin ser compradas, por eso también las venden sintéticas.
Marlene arreglaba unas rosas. Las regaba y cercenaba sus porciones marchitas. Una señora preguntaba por claveles que la “seño” de su hijo le mandó a comprar. La morena se decidió por las rosas. Aquellas rojas me traían un recuerdo.
Lavaba los platos a eso de las seis. Cumplía meses con él. Por tanto esperaba algo especial. A mí me dieron rosas. Un ramo de unas doce envuelto en un papel tornasolado y la sonrisa de él esperando mi rostro sorprendido. Lo más que pude hacer fue regalarle un beso y unas gracias de cartón.
Mi madre cuidó de ellas. Las metió en un jarrón con agua. Debió ser de esa que se trae de la Iglesia pues aquellas rosas vivieron hasta estos días, cuando por vainas del partido liberal -como dice mi papá-, sacudía ese libro empolvado que entre sus páginas conservaba la fragancia tenue de la flor que un día creció, y tiñó de carmín las hojas que se la llevaron e hicieron de ella un fósil perfecto.
Pareciese que esa rosa me esperaba todos estos años. Cuando tomé su tallo inerte, toda la gracia se desplomó. Las flores viven de amor. Ella percibió el sinsentido de su prolongación en esas hojas, que ya no eran más el recuerdo de un viejo amante. Y al sentir esa soledad, ese olvido por el otro, no tuvo más remedio que echarse a la muerte, ahora sí para siempre.
Por eso me resisto tanto a ellas. A ese encanto que desaparece tan rápido como el amor. La próxima vez que reciba una flor, ojalá obtenida de ese parque fragante, espero que sí sea para siempre.
sábado, 4 de julio de 2009
El pecado de Zelaya
lunes, 11 de mayo de 2009
A winston
Del taller no tengo quejas. Quizás la única es que no tiene la extensión que se merece. El cine no se puede apreciar en un semestre, hay tantos filmes bellos por explorar que se excluirían en esas dos horas semanales. Hasta ahora hemos palpado el gusto exquisito de Winston y su afición por el cine italiano. Sería rico explorar otros filmes, más allá de los que se ven en TV cable o en cartelera, claro que esto exigiría la apertura de un nuevo cine club, la posibilidad insaciable de matricular el mismo curso cada semestre, o un mayor compromiso de parte de los asistentes, de prolongar el taller a nuestras casas.
En esas tardes conocí la belleza de Cinema Paradiso, y el aroma cómico y costumbrista de una vieja Italia que hoy huele a rancio, o a la impactante historia de Oldboy que me predispone con esas culturas orientales, de las que emerge tanta violencia visual.
Es que el cine tiene un gran poder psicológico. Es capaz de conmover y generar prejuicios. A cuantos les parece agresivo escuchar el idioma alemán? A mí por lo menos. Y no tiene razón lógica mi prejuicio si el mayor contacto que he tenido con esa cultura ha sido cinematográfico. Con esa imagen de un niño que se sumerge en una letrina llena de mierda para que no lo encuentren los nazis en la Lista de Schindler, y todas las cintas que he visto del holocausto, creo que se ha creado cierta predisposición. Igual que cuando muchos sienten temor por los árabes, o cuando se disfruta de la violencia a la que nos han acostumbrado visualmente. El cine muestra y configura la realidad.
La semana pasada vi un cadáver. Estaba decapitado en la avenida Pedro de Heredia, en medio de sus vísceras y su charco de sangre. No sentí nada extraño. La vida es nada, me dije. Y seguí en mi taxi, con mis compañeras que se morían por tomarle una foto al muerto, en medio de una multitud que corría para ver el espectáculo, para saciar su morbo, sin una sola lágrima. Es eso normal? Nos hemos acostumbrado a celebrar la muerte como espectáculo diario y a rodar fotos y videos de masacres y accidentes como el café de la mañana.
¿Los medios audiovisuales nos han amaestrado para eso? Tan jodido está el mundo.
Las heces de la internet
La centinela de enfrente
viernes, 24 de abril de 2009
Aquel amor que fue
Autor Laura Restrepo Año 2002
Edición de lujo Alfaguara 2008 Ilustraciones Brian Nissen 72 Páginas
Género Cuento
Sinopsis Su amor nació en el Nilo. Ella estudiaba en Ginebra, él en Inglaterra. El idilio los obligó a desertar y a consumar su amor financiado por Hotel Mamma en una pensión romana. La familia de ella los separó cuando lo supo. Él terminó modesto en la Javeriana, ella se casó con un banquero suizo. Los años y los nietos pasaron más la curiosidad de explorar ese amor inconcluso siguió vigente, hasta esa semana en aquel aeropuerto de Miami. Intenso olor a rosas invisibles, de un amor que fue.
Calificación *****
Cuando todo parece haber acabado en esa edad en que los nietos, la pensión, la artritis, las arrugas y el cuerpo fláccido de tu conyugue te recuerdan que ya es hora de descansar, que tu labor está cumplida y te puedes marchar satisfecho, el amor de pareja termina siendo un acto de inercia entre seres que se sienten ajenos en su propio cuerpo, impotente, desgastado, débil.
Laura Restrepo en Olor a rosas invisibles nos presenta ese amor en la vejez, con una prosa exquisita sin caer en lugares comunes, relatando desde una tercera persona un reencuentro después de varias décadas de un amor inconcluso que resulta un completo fiasco.
Eloisa y Luicé deciden pasar una semana en Miami, con la curiosidad enardecida por esos previos encuentros telefónicos y epistolares rutinarios que atizaban la llama de ese amor pendiente, con la curiosidad de ver que pasaría en ese tiempo en que sus corazones palpitaban con monotonía.
Luicé le mintió a su mujer para asistir a ese lugar en el que no encontró el recuerdo invisible de Eloisa, sino una figura regordeta, fea y arrugada, la rosa materializada con sus pétalos marchitos. A él le costó reconocer a la Eloisa que alguna vez amó, más sintió un alivio pues previo al encuentro él se sentía igual que ella, acabado, con su ausencia dental, sus canas y esa barriga de sebo.
Aquella semana en Miami no pudo reconstruir ese amor de antaño que vivió todo ese tiempo en la esquina del antiguo café automático, en el corazón del narrador de este cuento, que en el fondo envidia un amor así, de esos que nunca tendrá, y que no podrá dar aquel final feliz que nunca tuvo.
Me agrada la narración incógnita de este relato desde la esperanza de un ser que siempre quiso un amor como el de Luicé, parecerse a Luicé, y que me crea ciertas dudas de la verosimilitud de Luicé. Existió él? Fue su amigo? O fue producto de su imaginación, igual que las putas de Magangué, aquella panadera o Gloria Eterna. Bueno eso quedará para cada lector.
Novela corta o cuento largo? sin importar la extensión, los invito a leer al amor como un sentimiento estético, a recordar a un viejo idilio y a disfrutar la prosa prodigiosa de Restrepo.
domingo, 5 de abril de 2009
La alcaldesa Judith Pinedo y la directora del EPA Ruth Lenes, estrenaron el domingo pescante manual en Chambacú. El Universal
Cinco minutos tardó la alcaldesa Judith Pinedo Flórez en pasar de un lado a otro por el Pescante reinaugurado en la celebración del día mundial del agua. El mismo tiempo que demora el contenido de la descarga de un inodoro cartagenero en llegar a sus lugares de vertido.
La reinauguración del pescante a la altura de Chambacú, evento al que asistieron
Según la alcaldesa Judith Pinedo Flórez, la acción conjunta de
Intercambio acuático
La contaminación que soporta
Adicional a las diez compuertas de intercambio hay otra alterna en el sector de Chambacú. EPA
El sistema ubicado en Crespo, utiliza diez compuertas que se abren dos veces al día. Seis permiten la entrada del agua de mar, que se dirige por una pantalla metálica hacia donde está el agua servida, y cuatro despiden el agua de
Según Mauricio Sánchez, ingeniero encargado del proyecto “el cloruro de sodio, que es la sal, elimina todos los patógenos, y todos los microorganismos que le hacen daño al ser humano y tenemos el sistema de compuertas, que prácticamente nos brinda la oportunidad de que el agua del mar, limpie, entre a
El Pescante y la compuerta de Chambacú
El pescante reinaugurado el pasado domingo en Chambacú, en el portal que impide que el agua de
Según la alcaldesa Judith Pinedo Flórez, esta compuerta es importante para
Luego de cinco años de inactividad, el pescante que funciona por polea, podrá ser manipulado nuevamente por transeúntes y pescadores de forma segura, pues habrá una persona encargada de supervisar los cruces en una caseta de información contigua.
“Desde el año cuatro dañaron el Pescante, lo vandalizaron, le robaron cosas, se perdió y entonces pretendiendo pasar, dañaron la compuerta para que no cerrara, la compuerta es muy importante, porque es que el agua limpia de la ciénaga siempre va a fluir hacia la bahía para limpiar todo el caño, el lago del Cabrero y todo lo que cruza”, dice Jose Henrique Rizo Pombo, ex Ministro de Transporte que gestionó en el 96 la creación de
Sobre el sistema manual del pescante se refiere Campo Elías Teheran Dix residente de la ciudad, “El sistema sí es arcaico, y debía haber algo moderno, pero con la urgencia que se necesitaba que esto funcionara yo creo que no debemos mirar tanto el funcionamiento del sistema manual, sino el servicio que van a prestar las compuertas”, coincidiendo con el ingeniero Mauricio Sánchez en que el abandono de la compuerta de Chambacú fue producto de la negligencia en administraciones anteriores.
La recuperación de
Metástasis marítima
A pesar de los logros que el sistema hídrico de marea estabilizada,
Cardique dio licencia ambiental para la construcción y operación de este proyecto que tendrá 1.83 mts. de diámetro, un tramo terrestre de
Según Cardique, el fondo de la zona de descarga del Emisario no presenta ecosistemas representativos que puedan ser dañados.
Para Rafael Vergara, director del Departamento de Tránsito y Transporte de Cartagena (DATT), “en la medida en que esté funcionando el sistema del emisario que no es lo que yo hubiera querido, pero que es mucho mejor de lo que hoy tenemos, la bocana va a cumplir un papel todavía mucho mejor, porque ya sin las descargas de aguas residuales…”.
Para Jose Henrique Rizo Pombo el Emisario Submarino no era menester. El distrito podía invertir en la optimización de
Jose Rizo Pombo, ex ministro promotor de
Debates de esta índole se han librado anteriormente en el Distrito. Sucedió con la propuesta de la creación de un puerto carbonífero en Barú, que fue negada por el presidente Álvaro Uribe, en tanto afectaría el turismo y los ecosistemas de la isla. Mas el Emisario Submarino ya es un hecho. Hoy se adelantan las obras terrestres que lograrán su cometido de descontaminar
siempre y cuando se erradiquen los desechos industriales que enfrenta la primera, y la contaminación periférica que emana de los problemas sociales que vive la última.
“Lo más importante que estamos haciendo y en eso vamos bastante bien es el reto de tener en funcionamiento el emisario submarino antes de lo previsto”.Judith Pinedo Flórez, alcaldesa de Cartagena. Semana
El verdadero contaminante
Las aguas residuales no son las únicas culpables. La contaminación que actualmente recibe
La mayor parte de la población instalada en el borde de La Ciénaga
El panorama es alarmante. Mientras sus habitantes tengan problemas,
Ángela Alzate, fotógrafa y administradora pública, cuenta incluso que en viviendas aledañas a La Ciénaga
Por otra parte, según un estudio de la Pontificia Universidad Javeriana[1], “La Ciénaga está sometida también a los sedimentos provocados por la erosión de la Popa y a los sedimentos y agroquímicos (pesticidas) que son transportados por las corrientes pluviales”.
Son alrededor de 300.000 los habitantes que colindan esta zona. Mientras vivan en la miseria persistirán los problemas de
La salvación
El distrito acoge salidas inversamente proporcionales a sus problemas. La contaminación de la Ciénaga de la Virgen es un asunto de emergencia social, no de millonarias inversiones ambientales.
El alcantarillado sería la primera señal de reivindicación de la zona sur oriental. Dios lo libre de entrar en la moda de las prórrogas que invaden por estos días al Distrito.
Mientras tanto la inversión inicial de 240 millones de dólares para el Emisario Submarino, resulta anodina considerando que por acción de La Bocana solo falta un 5% de recuperación de la Ciénaga –según la oficialidad-, cifra que imagino corresponde a la contaminación ejercida desde los patios traseros de los que habitan la orilla cienaguera.
Aunque el Emisario erradique las emisiones de materia fecal servida en la Ciénaga, y la Bocana siga actuando como depuradora de este cuerpo, no se logrará recuperar ese 5% anhelado para justificar la millonaria inversión, en tanto no se invierta en la verdadera urgencia: mejorar la calidad de vida y garantizar los derechos humanos de las personas que duermen en la cloaca de la zona sur oriental.
Esa es la única salvación.
[1] Lineamientos para el desarrollo de una estrategia de intervención en atención primaria en salud y promoción de la salud para la población desplazada, pobre y vulnerable de la zona sur oriental de Cartagena.